2. Identifica los KPIs: Define los KPIs que te ayudarán a medir el progreso hacia tus objetivos estratégicos. Estos KPIs deben ser relevantes, medibles y estar alineados con tus objetivos estratégicos
3. Establece un sistema de medición: Define cómo vas a medir cada uno de los KPIs. Puedes utilizar herramientas de seguimiento de métricas como Google Analytics o redes sociales para medir el impacto de tus esfuerzos de marketing
4. Diseña tu CMI: Crea un cuadro de mando que muestre los KPIs y su progreso hacia los objetivos estratégicos. El CMI debe ser fácil de entender y utilizar, y debe mostrar la información de manera clara y visual.
5. Establece un calendario de revisión: Define la frecuencia con la que vas a revisar tu CMI y cómo vas a compartir esta información con tu equipo. Esta revisión puede ser mensual, trimestral o semestral, según tus necesidades.
6. Comunica tus resultados: Comunica tus resultados y el progreso hacia tus objetivos estratégicos a todo el equipo de la empresa. Esto les ayudará a entender cómo su trabajo contribuye al éxito general de la empresa.
7. Ajusta tu estrategia: Utiliza la información que obtienes de tu CMI para ajustar tu estrategia y hacer cambios en tus tácticas para alcanzar tus objetivos estratégicos.
Recuerda que el Cuadro de Mando Integral es una herramienta muy útil para medir el rendimiento de tu empresa, pero es importante que sea un proceso continuo de mejora. Revisa tu CMI regularmente, haz ajustes y asegúrate de que sigue siendo relevante para tu empresa y sus objetivos estratégicos.